domingo, 26 de agosto de 2007

Porqué los paises ricos son ricos y los pobres son pobres

Martin Varsavsky - www.martinvarsavsky.net

Una de las mejores teorías de Karl Marx fue la que dice que todo el valor viene del trabajo humano y que, paradójicamente, estudié en mis clases de marxismo en la Universidad de Nueva York. Sin embargo, si tuviera que reescribir esa teoría 150 años más tarde le cambiaría algunas cosas importantes, como que el valor del trabajo no solo viene de las horas que se han invertido en la producción, sino también de un factor más difícil de medir, que es la creatividad, el valor agregado, la productividad, la capacidad organizativa, y hasta el nivel moral de esta mano de obra que no está directamente relacionado con las horas empleadas, pero que mucho afecta el resultado de la misma. Si creo que en términos generales el “capital” proviene del trabajo humano, pero creo que muchas de las teorías de Marx sobre la explotación y la consecuente revolución no se cumplieron por la manera ortodoxa de Marx de medir el trabajo humano en horas trabajadas y no en el valor agregado de cada una de estas horas, algo muy complejo de hacer. Además, Marx subestimó el poder de los sindicatos y la capacidad de organización de los trabajadores para conseguir mejores condiciones para ellos creando el estado de bienestar, pero sin abandonar el capitalismo como modelo productivo. Esto lo aprendieron bien los socialistas europeos (considero socialista también al PP) que en vez de revolución llegaron a una evolución no justa porque aún queda bastante injusticia en Europa pero bastante más equitativa de lo que existía en la época de Marx.

Pero pese a que el Marxismo ortodoxo cayó en desuso en la mayoría del mundo las viejas ideas de Marx siguen muy de moda en España y Latinoamérica especialmente cuando se trata de explicar por qué son pobres los paises pobres o ricos los ricos. En la esfera del mundo hispano parlante una gran parte de la gente parece creer que los países ricos son ricos porque explotan a los países pobres. Que los paises ricos se nutren de los pobres y que su riqueza consiste en el robo a los paises pobres. Yo, en cambio, creo que los países ricos son ricos, como los países escandinavos por ejemplo, porque tienen una mano de obra especialmente organizada, educada, productiva y creativa que genera mucho valor agregado y no porque roban, por ejemplo, a los africanos. Es más, creo (y se que suena absurdo) que los países más pobres no son los que son explotados por las grandes empresas o inversores “ladrones”, sino los que simplemente son olvidados por ellos y en los que nadie invierte como, por ejemplo, Corea del Norte.

Ya escribí un artículo sobre los “españoles quejicas” que son los españoles que critican enormemente a los gobiernos que les han hecho que el ingreso español promedio se acerque cada vez más a la media europea. El siguiente tendría que ser sobre los “hispanos quejicas” aunque estos son quejicas de la manera opuesta. Muchos españoles desprecian a los líderes que los han llevado a aumentar enormemente su ingreso medio. En latinoamérica ocurre lo contrario. Muchos latinoamericanos adoran a líderes, como los líderes peronistas argentinos, que les llevaron a la ruina. Pero al mismo tiempo detestan a los paises ricos que consideran colonialistas cuando son estos los que tienen el capital y conocimientos que los paises latinoamericanos necesitan para salir de la pobreza. Si uno lo escucha a Hugo Chavez quedaría convencidos de que Venezuela, por ejemplo, es tan pobre (PIB per cápita anual de solo $7000) porque le roban a diario su enorme riqueza. Pero la verdad es que Venezuela sería aún muchísimo más pobre si tuviera que vivir de los medicamentos desarrollados en Venezuela, de la tecnología petrolera desarrollada en Venezuela, y especialmente si los tan odiados ricos extranjeros que Chavez critica en cada uno de sus discursos no le compraran su petroleo.
Elegir a un líder como Chavez ,que repite que la pobreza de su pueblo se debe en gran parte a los norteamericanos, demuestra la tendencia de esos pueblos a culpar a los demás de sus problemas y no a sus propios líderes ladrones (la revolucionaria Venezuela de Chavez tiene el ingreso peor distribuido que su enemigo el ya enormemente injusto Estados Unidos).

Algo parecido ocurre en Argentina y donde muchos de los habitantes que viven en la pobreza creen que su pobreza tiene su origen en el hecho de que los extranjeros les roban constantemente lo que podrían tener. En términos macroeconómicos, el caso del default de Argentina es simbólico. Argentina pidió 220 mil millones de dólares prestados y no los devolvió. Esto significa que los argentinos en su conjunto le sacaron a los extranjeros 220 mil millones de dólares (sabemos que pocos se quedaron con mucho pero ese es otro tema). El default de Argentina es quizás el desfalco más grande de la historia de la humanidad (el default argentino fue tres veces más grande que el de Enron). Sin embargo, hoy en día la gran mayoría de los argentinos cree, no que la Argentina le dejó de pagar al mundo 220 mil millones de dólares que le habían prestado por ejemplo familias italianas compradoras de bonos, sino que “el mundo” quizo explotar a los “pobres argentinos” que por suerte se dieron cuenta de este engaño y no pagaron. O, si no, creen que no pagar fue una manera de “hacer justicia”, ya que recuperaron “una mínima parte” de todo lo que históricamente les habían robado.

Personalmente, creo que la situación fue muy diferente. Para mi la historia de este “robo” pasa más por temas puramente argentinos como que la absurda política del “uno a uno” combinada con enormes déficits fiscales nacionales y provinciales fue un verdadero desastre y que la Argentina terminó endeudada a niveles insostenibles gracias a ella y se fue a la quiebra. Las quiebras existen en el mundo de los negocios y en muy pocos casos existen también el las emisiones de deuda soberana, pero llamar ladrón al acreedor, como se hace comunmente en Argentina, es una óptica confusa. Opino en cambio que este enorme error de cálculos que llevó al default argentino tiene que ver con lo poco críticos que son los votantes argentinos de sus pésimos líderes como Menem, Cavallo y De la Rúa, y no con un robo organizado por una banda de ladrones del FMI. Si hay una “banda de ladrones”, creo que esta es más que nada una banda muy argentina que consiste en una unión de políticos especialmente incapaces como De la Rua (a quien conocí bien) o corruptos como Menem o Kirchner y muchos empresarios argentinos absurdamente beneficiados por estos líderes y sus políticas, que terminan resultando en que un pueblo bastante bien educado se arruine. Si la Argentina tiene un ingreso pésimamente distribuido que engaña una renta media no tan baja (PIB per capita de $15.000 anuales por habitante en términos de paridad cambiaria) es simplemente porque los argentinos no votan a líderes capaces de instaurar un estado de bienestar razonable ya que todos sabemos que sin un estado de bienestar el capitalismo no funciona.

Para mi no cabe duda de que –aunque si que hay multinacionales como Telefónica, IBM u otras que probablemente han sobornado mucho en Latinoamérica– la gran mayoría del robo en latinoamericano es local: de argentinos a argentinos, mexicanos a mexicanos, brasileros a brasileros y que este robo viene de que en latinoamérica existe una enorme cantidad de mano de obra sub empleada o desempleada, combinada con una falta de líderes políticos y empresarios capaces y honestos. Este es el mejor caldo de cultivo para la explotación al estilo siglo XIX que describía Marx.

Quizás ayudaría a los que creen que los países ricos son ricos porque roban a los países pobres estudiar el caso de países como Noruega, Suecia y Dinamarca, tres de los más ricos del mundo en términos per cápita. Creo que es obvio que estos países no son ricos porque constantemente roban a países pobres. Si, siempre se puede construir algún argumento absurdo del tipo “Ikea va y hace sus muebles en un país de mano de obra barata y los explotan”, pero también se puede dar vuelta ese argumento y decir que sin esa inversión extranjera esos países estarían peor.

Y pasando a Estados Unidos, el gran satán, la pena es que este país le ha dado mucho de comer a los que piensan que son ricos porque roban. Pero esto ha ocurrido por la estúpida política norteamericana que se rige por grandes y (muchas veces) equivocados temas (la guerra al terror), que crean escenarios que confunden al público mundial y le hacen pensar que Estados Unidos se dedica a robar al mundo como, por ejemplo, robarle el petróleo a Irak. Pero yo no solo creo que esto no es verdad, sino que opino lo contrario, que Estados Unidos despilfarra el capital de trabajo generado por su propia gente en absurdas aventuras militares que no solo son trágicas y que llevan a la muerte de cientos de miles de inocentes, sino que además son un pésimo negocio. Irak exporta 25 mil millones de dólares anuales de petróleo, pero Estados Unidos se ha gastado 400 mil millones de dólares invadiendo Irak, un pésimo negocio. Es más, si tuviera que decir donde está el robo ahí, diría que es entre los mismos norteamericanos que usan el dinero que pagan en impuestos para dárselos a los amigos de Bush que dirigen las empresas que fabrican armamentos y “reconstruyen” Irak. Veo mucho más robo entre norteamericanos que hacia los iraquíes que, tristemente, parecen más interesados en matarse entre ellos que en defenderse de sus invasores ladrones.

Conclusión: los países ricos son ricos porque tienen gente educada, trabajadora, organizada y creativa. Los países pobres son pobres porque tienen gente menos educada, más desorganizadada, menos creativa, con muchos menos recursos, y en general están dirigidos por líderes corruptos. No digo que no existan casos en que los países ricos roban a los pobres, pero en general no creo que estos casos explican por qué los paises ricos son ricos. Otra manera de ver esto es ver que en paises como Estados Unidos una pequeñísima parte de su PIB pasa por el comercio exterior y los beneficios de sus multinacionales.

Para terminar cito el ejemplo de Corea. Corea está dividida en dos Estados, uno que adoptó el capitalismo combinado con estado de bienestar y llegó en pocos años a ser uno de los países más ricos del mundo, y otro que se quedó en un marxismo obsoleto y autárquico que lo llevó a la ruina. Creo que son pocos los que creen que la globalizadísima Corea del Sur está siendo constantemente explotada y que la aislada Corea del Norte –que sin duda no es explotada por nadie– es la que ha logrado el mayor bienestar en su población. Corea, un pueblo divido por las ideologías, es un buen ejemplo de que globalizarse en si no es malo. El tema es que hay que globalizarse con un pueblo bien educado, con líderes patrióticos –en el buen sentido de la palabra (honestos, capaces y que quieren lo mejor para su pueblo)– y protegerse de los aspectos negativos de la globalización con un buen estado de bienestar, recogiendo los aspectos positivos, especialmente la capacidad de especializarse y prosperar y disminuyendo el efecto de los negativos como el daño a industrias expuestas a la competencia. Corea del Sur es un buen ejemplo de esta globalización bien encaminada, ellos supieron defender lo que se podía defender de su industria, atacaron donde podían atacar, la electrónica por ejemplo, y lograron salir adelante pese a competir con dos increibles gigantes, China y Japón.